Contenedor

La tiranía

        Una lluvia de piedras calló estruendosamente sobre la fibra que recubría a los mercenarios. La mayoría no se inmutaron, hasta que recibieron la orden de cargar. Entonces golpearon brutalmente a los manifestantes y muchos de ellos fueron hechos prisioneros.

         Después aparecieron unos pocos destacados, que encararon al gobierno con firmes argumentos. Una lluvia de palabras golpeó contra la violencia institucional sin hacer mella alguna en ella. De nuevo, los guardianes se lanzaron contra los insumisos y los encarcelaron por hablar.

          Alguien propuso reducir unas cuantas páginas cada libro escolar, para aumentar otros presupuestos: haría falta detener más gente…

(En 100 palabras)